El equipo dirigido por Damián Pedemonte y Guido Pederzoli, llegaba al partido como punto, ya que en los partidos anteriores frente al mismo rival, no había podido conseguir resultados positivos. Pero esta era un final, y nuestros pibes la jugaron como tal.
Después de una semana de arduo trabajo, y charlas grupales que sirvieron para hacer un giro en la cabeza de los jugadores, nuestros pibes salieron a demostrar que las finales se juegan a morir.
Y así fue, que tras estar dos veces abajo en el marcador, lograron recuperarse con mucha más actitud que buen fútbol, aunque por momentos el rayo intentó generar un juego fluido que hizo desgastar al rival. Entonces fue ahí cuando la dupla técnica se la jugó y consiguieron el objetivo.
FELICITACIONES A NUESTOS PIBES DE INFANTIL!
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